Consigue aumentar tu facturación de forma efectiva planificando mejor los días fuertes del año
En la actualidad lo más común es ir de compras en los principales días del año, cuando son fiestas o días especiales. Normalmente los negocios se preparan para estas fechas señaladas lanzando nuevas colecciones, productos especiales y rebajas especiales aprovechando los días de fiesta en trabajos y colegios. Esto significa un mayor volumen de trabajo durante ciertas fiestas y más ventas.
Estamos hablando de días como San Valentín, el Día del Padre o de la Madre, el Día de la Mujer o el muy reciente Black Friday. En nuestro calendario contamos con muchos días importantes, algunos festivos y otros no, pero todos aprovechables desde el punto de vista de un comercio pequeño o grande, ya que suponen jornadas de ingresos adicionales al estar ligados a casi todos ellos con regalos, es decir, normalmente en San Valentín o el Día de la Madre solemos hacer regalos a nuestros seres queridos, lo que es una excusa para ir de compras.
A pesar de todo, la planificación adecuada brilla por su ausencia en los días fuertes de venta y la planificación, en general, está muy desaprovechada en la mayoría de los negocios. Nos referimos sobre todo a los negocios pequeños o principiantes que, a pesar de que algunos si los tienen en cuenta, suelen planificar sus ventas tarde o mal.
El truco es estar preparado, hay que conocer estos días y tener claro qué se quiere hacer, qué público o qué tipo de consumidor será el que se nos acerque y qué producto en concreto busca. Según tu tipo de negocio puedes aprovechar algunos o incluso todos los días festivos si los planificas bien y con antelación e inviertes algo de dinero en una publicidad con tiempo, verás tu negocio compensado. Además, con el tiempo aprenderás técnicas nuevas y llegarás a conocer a tus compradores para poder darles el trato que requieren.