Cuando hablamos de comenzar con una startup a todos nos viene la cabeza la idea de montar un gran negocio de la nada. Ese de la nada suele estar relacionado con temas económicos pero muchos lo llevan a otro terreno y quieren montar una empresa de índole tecnológico sin tener ningún tipo de conocimientos sobre la materia. Esto es un grave error pues solo en casos extraños se dan estas situaciones, lo normal es que a partir de unos conocimientos adquiridos en tu formación puedas aportar algo diferente a la sociedad en forma de una compañía que te permite vivir de ella. Por tanto, si quieres montar una startup deberás formarte y desarrollar tus conocimientos. Tanto tu, como tu equipo. No todo en lo mismo pues la clave será ser cuanto más resueltos mejor para poder subcontratar menos y hacer más cosas in house.
Las opciones para formarse son muchas y variadas. Podemos estudiar desde casa y conseguir los conocimientos necesarios, pero también podemos ir a una universidad, a un centro de formación u optar por los cursos Euroinnova con descuento. El caso es formarse de la mano de unos buenos profesionales o unos buenos recursos (en el caso de las personas autodidactas), para lograr esos conocimientos que hagan que tu empresa se diferencia del resto y consiga generar ingresos, que al final es lo importante.
Esto no significa que haya que innovar si o si para crear una empresa, se pueden hacer cosas que hacen otras empresas pero mejor. Y este mejor solo se consigue con formación, aportando valor añadido a lo que das a la sociedad. Es casi imposible ver empresas de carácter tecnológico formadas por emprendedores sin formación. Puede que no tengan títulos y sea formación autodidacta, pero esta es tan válida como cualquier otra.