Las estrategias de marketing llevan a las empresas a cubrir cualquier frente que sea capaz de captar o fidelizar clientes. El primer paso imprescindible es tener una página web, claro está, pero muchas empresas olvidan que una página web no tiene porqué ser un mero cartel digital, una carta de presentación estática. Contar con un blog tiene múltiples ventajas: aporta dinamismo, capta clientes, fideliza y muestra una constancia, al tiempo que puede llegar a hacer de la web un lugar de referencia.
Integrar un blog en la web de una empresa es relativamente sencillo. Se puede optar por una plataforma gratuita externa o por un sistema de gestión de contenido como WordPress. Sea como fuere hay que tener en cuenta algunos aspectos fundamentales en el desarrollo del blog para que sea una eficaz herramienta de marketing.
Diseño e imagen
Fundamental en el marketing es la imagen, una característica que se ha de tener muy en cuenta cuando se crea un blog. Este debe ser acogedor y atractivo. Debe invitar al lector a quedarse. Para evitar la estampida una de las cuestiones importantes es el color, junto con los widgets. La tendencia lleva a utilizar colores claros y homogeneidad en el conjunto. Por supuesto no hay que olvidar el utilizar plantillas “responsive”, que se adaptan a los ajustes de smartphones y tabletas.
Interacción con el lector
Un blog no es una simple pizarra donde publicar noticias relacionadas con la empresa, ofertas y promociones. Además debe cumplir la labor de interacción con el cliente. Fomentar los comentarios. Un blog sin comentarios da imagen de que es poco leído y de que aporta poco. Pero tan importante como fomentar los comentarios es responder a las cuestiones planteadas por los lectores y usuarios. El blog viene a completar de una forma diferente a las redes sociales. Otro de los pilares principales en el marketing de una empresa.
Las redes sociales se diferencian por la forma de publicar la información; que lleva a determinar el público objetivo en cada una de ellas. No es preciso estar en todas las redes sociales, pero sí hacer una selección de dónde está el público objetivo de nuestra empresa. Quizás a un despacho de abogados no le interese estar en Pinterest, pero sí puede serle útil Google +, por ejemplo.
Con todo hay algo fundamental: el contenido es el rey. Vela para que sea siempre original y de calidad.